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Abuelo, ora por mi

La gratitud como estilo de vida para los abuel@s

Quizás como nunca antes, hoy se habla de la Gratitud y sus beneficios. La gratitud tiene el efecto de un tranquilizante…normalmente es como consecuencia de un bien recibido.

Demasiadas veces nuestra tendencia es la de poner nuestros ojos o recuerdos en aquellas cosas “malas” que nos han sucedido…. Si miramos atrás y hacemos “memoria histórica” seguro que podremos identificar muchas cosas buenas recibidas. Muchas de ellas despertarán de nuevo gratitud en nuestro corazón. Situaciones como la llegada de los hijos, la de los nietos, la fidelidad de tu esposo/a durante tantos años, la amistad de un amigo, el ascenso en el trabajo, aquel regalo que te sorprendió, aquel viaje lleno de recuerdos entrañables, y un largo etc. que despertarán agradecimiento de nuevo.

La vida está llena de bendiciones, y a medida que avanzamos en nuestros años, es un momento perfecto para reflexionar sobre la importancia de la gratitud. Vivir con un corazón agradecido no solo nos acerca a Dios, sino que nos ayuda a valorar a los que tenemos cerca como también a disfrutar de cada día con una perspectiva positiva.

Cómo podemos cultivar una vida agradecida:

  1. Reconocer las Bendiciones Diarias:

Hagamos una lista de las cosas “pequeñas” que cada día disfrutamos. Si eres cristiano, agradécele a Dios el sol que brilla, el canto de los pájaros, o incluso una taza de café caliente. Haz tu lista y te sorprenderás.

  1. Ora y Medita:

Dedica tiempo a “hablar con Dios” esto es orar o rezar. Agradeciendo a Dios por lo que tienes.

  1. Compártela con Otros:

La gratitud se multiplica cuando la compartimos. Habla con tus amigos y familiares sobre lo que aprecias en ellos y en su vida.

Ni nos imaginamos el efecto que hace en la vida del receptor al expresarle agradecimiento.

  1. Recordar los Momentos Difíciles:

A veces, los momentos difíciles nos enseñan lecciones valiosas. ¡Cuánto hemos aprendido a través de las adversidades! ¿Verdad? posiblemente muchas de ellas nos han hecho más fuertes, más empáticos con los demás que sufren y más solidarios. Las adversidades nos ayudan a valorar más las bendiciones que tenemos.

  1. Cultivar Relaciones:

Las relaciones son una de las mayores bendiciones de la vida. Dedica tiempo a tus seres queridos, escucha sus historias y comparte momentos significativos. La gratitud también se encuentra en el amor y el apoyo que nos brindamos mutuamente.

En mi familia celebramos el Dia de Acción de Gracias, una  celebración muy esperada por toda la familia y una buena oportunidad para hacer un repaso del año y JUNTOS como familia agradecer a Dios su protección y tantas y tantas cosas que recibimos sin merecerlas.

Se acerca Navidad y con ella el recuerdo más impactante, importante y significativo de toda la historia de la humanidad, Jesús visitándonos. Aterrizando en nuestro planeta llamado Tierra y haciéndose uno de nosotros y ofreciéndonos una vida nueva.

Una buena oportunidad para prepararnos, con un corazón eternamente agradecido.

Y como nos lo aconseja un abogado del primer siglo conocido como el apóstol Pablo cuando dice a los Tesalonicenses, “Dad gracias en toda ocasión…porque esto es lo que Dios quiere.”

Cesca Planagumà

Orientadora Familiar

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